Expresión de una vida: Bordados del Colca
Los bordados en textiles, en cuanto representaciones, pueden hacer las veces de un lenguaje. Lo que dicen va grabado en las prendas de la gente, la hacen portadora de una voz, de una experiencia, de u
Los bordados en textiles, en cuanto representaciones, pueden hacer las veces de un lenguaje.
Lo que dicen va grabado en las prendas de la gente, la hacen portadora de una voz, de una experiencia, de una forma de ver su mundo y la realidad. Las comunidades del Colca han logrado llevar su expresión en bordados cada vez más lejos, y no por casualidad: su gracia y encanto trascienden los idiomas.
Se trata, de hecho, de bordados realizados a través de maquinasca; es decir, hechos a máquina, pero sin moldes ni patrones, que reflejan la cosmovisión andina. Los artesanos crean variedad de motivos con un sello muy particular. Cada figura es, gracias a sus manos, un ícono propio, parte de un código compartido en este caso, por la comunidad del Colca. Corazones, flores de cantuta, de manzanilla, cóndores, vizcachas, zorros, estrellas, truchas gorriones, picaflores y perdices, además de camélidos sudamericanos, entre otras criaturas, se juntan y adornan armónicamente prendas y variedad de paños, haciéndolos de inmediato reconocibles en sus vivos colores.
En el Valle, es típico que las damas usen largas polleras multicolores adornadas con estos bordados. Y en la parte superior del cuerpo el uso de camisas de gasa con corpiños y chaquetas ajustadas con chumpis o fajines que ayudan a resaltar la silueta femenina con mayor gracia, además de otro tipo de ornamentación llamadas pitunas que adornan las trenzas de las damas. En las festividades y presentaciones de danzas los hombres también visten camisas y chaquetas con escotes, bolsillos y mangas bordadas, además de polleras multicolores. Es así que la obra de los artesanos luce en las calles como en un desfile permanente. Refuerza la identidad de los pobladores del Colca, pero invita también, a los visitantes, a adoptar la magia de sus vestidos.
Por medio de estos bordados, los viajeros y turistas pueden llevarse consigo de vuelta a casa, “historias” de su travesía, hacer de la aventura, algo más personal, y ampliar las fronteras de su mundo, entendiendo los usos, costumbres y la estrecha relación de los hombres y las mujeres del Colca con su paisaje. Polleras, camisas, chalecos, mantas, suéteres, chullos, bufandas, ponchos, guantes y más, como verdaderos objetos de memoria, prendas con alma del Colca.